El Orgullo LGTBIQ+ de Taipéi ha llenado este sábado de reivindicación las calles de la capital de Taiwán, territorio referente en la defensa de los derechos del colectivo en Asia, región donde las personas LGTBIQ+ suelen enfrentar represión y hostigamiento. En torno a 150.000 personas, según los organizadores, desafiaron a la lluvia para recorrer las calles de la urbe, que forma parte de la red de ciudades arcoíris.
Taiwán aprobó el matrimonio igualitario en 2019 y es un referente en la defensa de los derechos LGTBIQ+ en Asia
El Orgullo LGTBIQ+ de Taipéi ha llenado este sábado de reivindicación las calles de la capital de Taiwán, territorio referente en la defensa de los derechos del colectivo en Asia, región donde las personas LGTBIQ+ suelen enfrentar represión y hostigamiento. En torno a 150.000 personas, según los organizadores, desafiaron a la lluvia para recorrer las calles de la urbe, que forma parte de la red de ciudades arcoíris.
La marcha, que comenzó con una concentración en los alrededores del Ayuntamiento, llevaba como lema: Más allá de los enlaces, más que clics, una reivindicación de la vida tangible ante la virtual para “reconstruir vínculos humanos reales y empáticos capaces de comprender las diferencias”. Un contraste con el odio que invade muchas redes sociales en un contexto global marcado por las amenazas y en algunos casos, retrocesos. Asistimos a “una ola reaccionaria, contraria a los valores de diversidad, equidad e inclusión”, alertó el presidente de la organización Taiwan Equality Campaign, Tai Yu-hsun. Una dinámica que, según dijo, se ha acentuado tras el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca y la instauración de una retórica y la aprobación de medidas que limitan los derechos de las personas del colectivo.
“El Gobierno seguirá trabajando para garantizar que todas las personas sean valoradas por su singularidad, libres para vivir y brillar en esta tierra, y para hacer de Taiwán una nación aún más inclusiva y comprensiva”, dijo el presidente taiwanés, William Lai, que mostró su apoyo al Taipei Pride en un mensaje en redes sociales. “Esperamos que la igualdad no sea solo algo escrito en las leyes, sino un valor compartido y abrazado en la vida cotidiana”, agregó. En 2023, el actual mandatario, gran defensor de la igualdad, marchó por las calles de Taipéi durante el Orgullo. Lai fue uno de los firmes defensores de la norma taiwanesa de matrimonio igualitario.
Durante la marcha de este sábado, que comenzó alrededor de las 14.00 (seis horas menos en la España peninsular), 26 carrozas surcaron la ciudad. El evento reunió a participantes y organizaciones LGTBIQ+ de toda Asia ―como el Festival Cultural Queer de Seúl o el Desfile Arcoíris de Kyushu, de Japón― evidenciando la fuerza de Taipéi como referente asiático en la defensa de los derechos y la visibilidad del colectivo.
“En Hong Kong, las cosas para la comunidad LGTBI+ han retrocedido. Es una vergüenza”, lamentaba, en una entrevista con Reuters, Eden Lau, de 33 años y llegado desde esta región, ahora controlada por China. Era la primera vez que este entrenador personal asistía al Taipei Pride y decía sentirse “extremadamente feliz”.

Aunque, los tribunales de Hong Kong han reconocido en varias sentencias que se practica “discriminación” contra las parejas homosexuales; en septiembre, el Consejo Legislativo de Hong Kong vetó un proyecto de ley para reconocer a las parejas del mismo sexo que hubieran formalizado su relación en otro país (mediante matrimonio o pareja de hecho).
Taiwán aprobó el matrimonio igualitario en 2019, convirtiéndose en pionero en Asia en este tipo de normativa. Después lo hicieron Nepal (en 2024) y Tailandia (desde enero de este año). Además, en 2023, el territorio equiparó los derechos de adopción entre parejas heterosexuales y homosexuales, y el año pasado el Gobierno de la isla anunció que reconocería los matrimonios entre taiwaneses y chinos del mismo sexo que se casaran en un tercer país.

La víspera del Taipei Pride, unas 3.000 personas participaron en la séptima edición de la Marcha Trans de Taiwán, uno de los escasos eventos asiáticos dedicados a los derechos y la visibilidad trans. En la isla, reclamada por China como parte de su territorio, las personas trans deben someterse a una cirugía de reasignación de sexo para conseguir cambiar su documentación. Recientemente, varios fallos judiciales han permitido excepciones a ese requisito.
Nada que ver con países como Japón y Corea del Sur, que renquean en la aprobación de leyes en favor de los derechos LGTBIQ+. Mientras, en China, donde la homosexualidad no está prohibida, las organizaciones denuncian hostigamiento contra las personas del colectivo.
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