Ion Aramendi ha disfrutado de un verano atípico junto a su familia. Lejos de la pequeña pantalla, tras decir adió a Reacción en cadena después de dos años y medio en antena, el presentador ha disfrutado de unas vacaciones familiares en La Manga (Murcia).
Lo ha hecho junto a su mujer, María Amores, con la que se casó en 2011, y los tres hijos que tienen en común. Se trata de unas imágenes que publica ¡Hola! en las que lo más llamativo, tal y como hace hincapié la revista, es el ‘nuevo’ aspecto físico del vasco.
En ellas Ion aparece con un cuerpo más tonificado y musculado respecto al que le vimos en sus últimas apariciones en televisión. Y es que, tal y como informa la revista, hace un año decidió recuperar y ha bajado nada menos que 12 kilos.
Este verano también María Amores recordaba el traumático parto que tuvo con su tercera hija, que a punto estuvo de tener consecuencias fatales para ella. «Hace tres años cumplía 40 semanas de embarazo. Tenía 45 años, por protocolo me tenía que presentar en La Paz a parir aunque Marieta no daba señales de querer salir… Y allí que me pusieron monitores… ¡Pero nada! Tardé un día entero en reaccionar y sentirme un poco de parto«, escribía Amores en sus stories de Instagram el pasado julio. «Yo pensaba que iba a ser un paseo. Que el tercer parto estaba chupado… Ingenua de mí. La cosa se complicó bastante», apuntaba en su texto.
«El tema es que estuve mucho tiempo empujando y Marieta venía mirando para arriba y parecía grande, se encajaba. Pasaban muchos médicos por allí, demasiados, hasta que llegó la jefa de servicio y les echó una buena peta a todos y me mandó a quirófano», continuaba.
Entonces, revelaba la decisión de los médicos. «Intentaron el parto con aparatos y finalmente decidieron cesárea. Oigo: ‘aquí está Marieta, sí que es grande, madre mía, menudo lechoncito’. Me la enseñan y de repente locura, ruidos, nerviosismo. Echan a la niña y al padre del quirófano y siento mucho frío, miedo y me voy a negro…«, relata.
«Me despierto sola, llena de cables, sin Marieta, sin Ion, uno de los peores momentos de mi vida. Me explican que estoy en observación, que se me reventó el útero. Me metieron un globo dentro y que no me podía mover porque había perdido mucha sangre. La niña está con su padre y yo sin móvil, sin poder beber agua. Solo lloraba. Una señora de la limpieza les llama la atención a las enfermeras porque no paro de llorar y deciden avisar a los médicos para que permitan a Ion traerme a Marieta porque yo no me creía que estuviera bien. Quería verla, estar con ella, olerla y no separarme jamás. Vino un médico y me dijo que estaba muy grave. Que había estado unos segundo en quirófano «ahí, ahí» y que lo importante es que tenía que recuperarme. Pero yo le imploré ver a mi bebé y lo conseguí», recordaba Amores en un relato que estremecía.
En unas imágenes que publica ‘¡Hola!’ se ve el nuevo aspecto físico del presentador de Mediaset.
Ion Aramendi ha disfrutado de un verano atípico junto a su familia. Lejos de la pequeña pantalla, tras decir adió a Reacción en cadena después de dos años y medio en antena, el presentador ha disfrutado de unas vacaciones familiares en La Manga (Murcia).
Lo ha hecho junto a su mujer, María Amores, con la que se casó en 2011, y los tres hijos que tienen en común. Se trata de unas imágenes que publica ¡Hola! en las que lo más llamativo, tal y como hace hincapié la revista, es el ‘nuevo’ aspecto físico del vasco.
En ellas Ion aparece con un cuerpo más tonificado y musculado respecto al que le vimos en sus últimas apariciones en televisión. Y es que, tal y como informa la revista, hace un año decidió recuperar y ha bajado nada menos que 12 kilos.
Este verano también María Amores recordaba el traumático parto que tuvo con su tercera hija, que a punto estuvo de tener consecuencias fatales para ella. «Hace tres años cumplía 40 semanas de embarazo. Tenía 45 años, por protocolo me tenía que presentar en La Paz a parir aunque Marieta no daba señales de querer salir… Y allí que me pusieron monitores… ¡Pero nada! Tardé un día entero en reaccionar y sentirme un poco de parto«, escribía Amores en sus stories de Instagram el pasado julio. «Yo pensaba que iba a ser un paseo. Que el tercer parto estaba chupado… Ingenua de mí. La cosa se complicó bastante», apuntaba en su texto.
«El tema es que estuve mucho tiempo empujando y Marieta venía mirando para arriba y parecía grande, se encajaba. Pasaban muchos médicos por allí, demasiados, hasta que llegó la jefa de servicio y les echó una buena peta a todos y me mandó a quirófano», continuaba.
Entonces, revelaba la decisión de los médicos. «Intentaron el parto con aparatos y finalmente decidieron cesárea. Oigo: ‘aquí está Marieta, sí que es grande, madre mía, menudo lechoncito’. Me la enseñan y de repente locura, ruidos, nerviosismo. Echan a la niña y al padre del quirófano y siento mucho frío, miedo y me voy a negro…«, relata.
«Me despierto sola, llena de cables, sin Marieta, sin Ion, uno de los peores momentos de mi vida. Me explican que estoy en observación, que se me reventó el útero. Me metieron un globo dentro y que no me podía mover porque había perdido mucha sangre. La niña está con su padre y yo sin móvil, sin poder beber agua. Solo lloraba. Una señora de la limpieza les llama la atención a las enfermeras porque no paro de llorar y deciden avisar a los médicos para que permitan a Ion traerme a Marieta porque yo no me creía que estuviera bien. Quería verla, estar con ella, olerla y no separarme jamás. Vino un médico y me dijo que estaba muy grave. Que había estado unos segundo en quirófano «ahí, ahí» y que lo importante es que tenía que recuperarme. Pero yo le imploré ver a mi bebé y lo conseguí», recordaba Amores en un relato que estremecía.
20MINUTOS.ES – Gente