La 'influencer' Andrea Garte se defiende tras la polémica por promocionar un peine de 170 euros: "Estoy orgullosa de lo que tengo"

«¿Es necesario gastarse 170 euros en un cepillo?», se preguntaba hace unos días Andrea Garte en un vídeo de TikTok, antes de justificar las razones por las que, en su caso, había decidido dar el paso de adquirir un simple peine dorado a un precio tan desorbitado. «Ya os adelanto que igual no es necesario, pero para mí lo es», indicaba la tiktoker, entre risas.

Sin más preámbulos, la influencer explicó que fue invitada a participar en una experiencia de spa organizada por una marca de cosméticos, Guerlain, en un viaje a Atenas con todos los gastos pagados. Allí, Garte no solo recibió un relajante masaje facial, sino que pudo comprobar los beneficios de este peine valorado en 170 euros que no dudó en comprar.

Según explicó, este utensilio, que cuenta con cerdas de distintas durezas y tamaños, le permite conseguir un acabado «clean look» perfecto sin necesidad de recurrir a otros peines para alisar su cabello. «Que el pelo se ve más radiante es un hecho», comentó la tiktoker, quien, al final de su vídeo, bromeóncon ser la «única» en gastarse tanto dinero en un cepillo.

Como era de esperar, las voces más críticas no tardaron en aparecer. Y es que, a pesar del tono desenfadado del vídeo, que ya acumula más de 2,4 millones de visualizaciones en TikTok, no fueron pocos los usuarios que criticaron a la influencer por promocionar en sus redes sociales un capricho tan caro que, en realidad, está al alcance de pocos bolsillos.

«Por este motivo se afirma que las influencers actuales han perdido capacidad de influencia: muchas de ellas parecen vivir en una realidad paralela, desconectada de las circunstancias de la mayoría de la población», reflexionó un internauta en la sección de comentarios del vídeo, poniendo en evidencia la desconexión de algunos creadores con la propia posición «privilegiada» de la que disfrutan.

Otros usuarios, asimismo, señalaron a la influencer por mudarse a Andorra por sus beneficios fiscales al tiempo que se gasta el dinero en «comprar chorradas». «Te gastas 170 euros en un peine pero no pagas impuestos en España», «No es normal que normalicemos esto», son solo algunos de los comentarios que han generado más reacciones.

La reacción de Andrea Garte

Ante el revuelo causado en TikTok, Andrea Garte decidió dar un paso al frente este domingo y pronunciarse públicamente sobre la polémica. No obstante, lejos de pedir disculpas, la tiktoker optó por quitar hierro al asunto, alegando que no entiende «cuál es el problema», pues, en todo momento, aclaró que «no era necesario» desembolsar tanto dinero para adquirir un peine, como hizo ella.

«Me lo compré y ya está, y estoy muy contenta, la verdad. No me queda otra porque hay que amortizar el peine como sea», comentó Garte, en tono de humor, mientras deslizaba el cepillo por su cabello. En este punto, la influencer subrayó su libertad para gastar dinero en aquello que le apetece en cada momento, en función de su poder adquisitivo.

«Es un peine muy caro. Quien quiera se lo comprará y quien no, no lo hará. Esto es como todo, amigos», expresó Garte, desmarcándose de llevar una «vida de lujos» alejada de los «problemas reales» que vive gran parte de la población. «Soy una persona normal, como cualquier otra. […] Lo falso sería vivir una vida que ahora mismo no me corresponde», apuntó.

Antes de poner fin a su vídeo, la influencer se mostró satisfecha con el estilo de vida que lleva a día y volvió a insistir en que no hay cabida para la polémica, a pesar del elevado coste del peine. «Estoy orgullosa de lo que tengo. Es a lo que aspiraba y es lo que tengo», concluyó Garte.

 La ‘tiktoker’ adquirió el controvertido cepillo para el pelo durante un viaje a Atenas con todos los gastos pagados.  

«¿Es necesario gastarse 170 euros en un cepillo?», se preguntaba hace unos días Andrea Garte en un vídeo de TikTok, antes de justificar las razones por las que, en su caso, había decidido dar el paso de adquirir un simple peine dorado a un precio tan desorbitado. «Ya os adelanto que igual no es necesario, pero para mí lo es», indicaba la tiktoker, entre risas. 

Sin más preámbulos, la influencer explicó que fue invitada a participar en una experiencia de spa organizada por una marca de cosméticos, Guerlain, en un viaje a Atenas con todos los gastos pagados. Allí, Garte no solo recibió un relajante masaje facial, sino que pudo comprobar los beneficios de este peine valorado en 170 euros que no dudó en comprar.

Según explicó, este utensilio, que cuenta con cerdas de distintas durezas y tamaños, le permite conseguir un acabado «clean look» perfecto sin necesidad de recurrir a otros peines para alisar su cabello. «Que el pelo se ve más radiante es un hecho», comentó la tiktoker, quien, al final de su vídeo, bromeóncon ser la «única» en gastarse tanto dinero en un cepillo. 

Como era de esperar, las voces más críticas no tardaron en aparecer. Y es que, a pesar del tono desenfadado del vídeo, que ya acumula más de 2,4 millones de visualizaciones en TikTok, no fueron pocos los usuarios que criticaron a la influencer por promocionar en sus redes sociales un capricho tan caro que, en realidad, está al alcance de pocos bolsillos. 

«Por este motivo se afirma que las influencers actuales han perdido capacidad de influencia: muchas de ellas parecen vivir en una realidad paralela, desconectada de las circunstancias de la mayoría de la población», reflexionó un internauta en la sección de comentarios del vídeo, poniendo en evidencia la desconexión de algunos creadores con la propia posición «privilegiada» de la que disfrutan.

Otros usuarios, asimismo, señalaron a la influencer por mudarse a Andorra por sus beneficios fiscales al tiempo que se gasta el dinero en  «comprar chorradas». «Te gastas 170 euros en un peine pero no pagas impuestos en España», «No es normal que normalicemos esto», son solo algunos de los comentarios que han generado más reacciones. 

Ante el revuelo causado en TikTok, Andrea Garte decidió dar un paso al frente este domingo y pronunciarse públicamente sobre la polémica. No obstante, lejos de pedir disculpas, la tiktoker optó por quitar hierro al asunto, alegando que no entiende «cuál es el problema», pues, en todo momento, aclaró que «no era necesario» desembolsar tanto dinero para adquirir un peine, como hizo ella.

«Me lo compré y ya está, y estoy muy contenta, la verdad. No me queda otra porque hay que amortizar el peine como sea», comentó Garte, en tono de humor, mientras deslizaba el cepillo por su cabello. En este punto, la influencer subrayó su libertad para gastar dinero en aquello que le apetece en cada momento, en función de su poder adquisitivo. 

«Es un peine muy caro. Quien quiera se lo comprará y quien no, no lo hará. Esto es como todo, amigos», expresó Garte, desmarcándose de llevar una «vida de lujos» alejada de los «problemas reales» que vive gran parte de la población. «Soy una persona normal, como cualquier otra.  […] Lo falso sería vivir una vida que ahora mismo no me corresponde», apuntó. 

Antes de poner fin a su vídeo, la influencer se mostró satisfecha con el estilo de vida que lleva a día y volvió a insistir en que no hay cabida para la polémica, a pesar del elevado coste del peine. «Estoy orgullosa de lo que tengo. Es a lo que aspiraba y es lo que tengo», concluyó Garte.

 20MINUTOS.ES – Gente

Te puede interesar