La puesta de largo del libro de Luis Rubiales, Matar a Rubiales, quedó este jueves marcada por el lanzamiento de huevos contra el expresidente de la RFEF. Un ataque llevado a cabo por el propio «tío carnal» del motrileño, Luis Rubén Rubiales López, de su misma edad y actor de profesión, que fue detenido justo después y ha quedado en libertad este viernes, cuando ha explicado los motivos que le llevaron a agredir a su sobrino.
«Muchas veces, cuando pasan este tipo de cosas también tienen sentido y pasan por algo, no son producto de la casualidad«, expresó este viernes en el programa Y Ahora Sonsoles. «Yo estoy molesto por un montón de cosas que han transcurrido en los últimos cinco o seis años, y él no se apea de la burra y quiere hacer parecer que manda lo que él tiene por encima de todo, y él tiene que ser el campeón de este partido de fútbol cuando nosotros simplemente no queremos tener ningún tipo de relación con él«, añadió, comenzando a explicar el motivo del incidente.
Y es que lo que ocurrió en el acto fue solo el desenlace de una guerra familiar que tuvo su punto de partida el día que empezó a fragmentarse la familia Rubiales, con el despido de su tío Juan Rubiales en 2022, tras dos años al frente del Museo de la Federación —y otros dos, entre 2018 y 2020, como jefe de Gabinete del expresidente federativo— acusado de filtrar información sobre el dirigente, que le llevó incluso a los tribunales.
«La paramos [la relación con Rubiales] y él ha salido esta semana en varios medios hablando de mi hermano Juan otra vez«, lamentó Luis Rubén, que en varias ocasiones insistió en que su hermano podría haber acudido a programas de televisión en el último año para hablar del exdirigente «y no lo ha hecho» porque «aparcó esto hace ya un tiempo». En este sentido, el intérprete ha querido recordar que Rubiales «sabe perfectamente que mi hermano Juan ha estado infartado y que ha estado dos años con depresión, que yo creo que indica mucho el tipo de persona que es él siguiendo con este cuento».
El actor insistió en que «hay muchas cosas más», no solo lo ocurrido con el que fuese su jefe de Gabinete durante su etapa en la presidencia de la RFEF, que reconoció que «es una de las cosas principales»: «Además, Juan estuvo en paro, se tuvo que ir a vivir a casa de su hijo, cobrando el paro, y le costó mucho conseguir un trabajo, y cuando lo ha conseguido empieza a hacer otra vez malas artes«, señaló, haciendo alusión a las últimas declaraciones de Rubiales sobre Juan.
«Si quiere guerra, pues la vamos a tener. Yo voy a ver hasta donde llega él, voy a ver lo que ha dicho de mí», añadió, antes de cargar contra su sobrino. «Yo soy un desequilibrado, pero él tiene dos problemas fundamentalmente: uno es, que no se fía de nadie, porque se piensa el ladrón que son todos de su misma condición, pero luego tiene otro problema que tapa a este, que es muy fanfarrón. Le gusta alardear y contar ciertas cosas, entonces como esto puede, a veces se le va la lengua y cuenta muchas cosas. Hay muchas cosas que me ha contado él, y cuando ya ha fanfarroneado, se arrepiente porque es muy desconfiado, porque todo lo que sepa de los demás lo utiliza como arma arrojadiza».
Antes de despedirse, Luis Rubén quiso atajar las sospechas sobre que el ataque pudiese estar preparado: «Yo no estaba conchabado con él porque llevo sin hablarme con él como tres años, más o menos. Más, desde que despidió a mi hermano Juan. Yo le mandé un mensaje y le dije que como siguiera así, íbamos a tener un problema muy gordo. Me bloqueó directamente».
Luis Rubén Rubiales López, tío del expresidente de la RFEF y autor del ataque, explicó este viernes en ‘Y Ahora Sonsoles’ los motivos que le llevaron a arrojar huevos a su sobrino durante la presentación de su libro.
La puesta de largo del libro de Luis Rubiales, Matar a Rubiales, quedó este jueves marcada por el lanzamiento de huevos contra el expresidente de la RFEF. Un ataque llevado a cabo por el propio «tío carnal» del motrileño, Luis Rubén Rubiales López, de su misma edad y actor de profesión, que fue detenido justo después y ha quedado en libertad este viernes, cuando ha explicado los motivos que le llevaron a agredir a su sobrino.
«Muchas veces, cuando pasan este tipo de cosas también tienen sentido y pasan por algo, no son producto de la casualidad«, expresó este viernes en el programa Y Ahora Sonsoles. «Yo estoy molesto por un montón de cosas que han transcurrido en los últimos cinco o seis años, y él no se apea de la burra y quiere hacer parecer que manda lo que él tiene por encima de todo, y él tiene que ser el campeón de este partido de fútbol cuando nosotros simplemente no queremos tener ningún tipo de relación con él«, añadió, comenzando a explicar el motivo del incidente.
Y es que lo que ocurrió en el acto fue solo el desenlace de una guerra familiar que tuvo su punto de partida el día que empezó a fragmentarse la familia Rubiales, con el despido de su tío Juan Rubiales en 2022, tras dos años al frente del Museo de la Federación —y otros dos, entre 2018 y 2020, como jefe de Gabinete del expresidente federativo— acusado de filtrar información sobre el dirigente, que le llevó incluso a los tribunales.
«La paramos [la relación con Rubiales] y él ha salido esta semana en varios medios hablando de mi hermano Juan otra vez«, lamentó Luis Rubén, que en varias ocasiones insistió en que su hermano podría haber acudido a programas de televisión en el último año para hablar del exdirigente «y no lo ha hecho» porque «aparcó esto hace ya un tiempo». En este sentido, el intérprete ha querido recordar que Rubiales «sabe perfectamente que mi hermano Juan ha estado infartado y que ha estado dos años con depresión, que yo creo que indica mucho el tipo de persona que es él siguiendo con este cuento».
El actor insistió en que «hay muchas cosas más», no solo lo ocurrido con el que fuese su jefe de Gabinete durante su etapa en la presidencia de la RFEF, que reconoció que «es una de las cosas principales»: «Además, Juan estuvo en paro, se tuvo que ir a vivir a casa de su hijo, cobrando el paro, y le costó mucho conseguir un trabajo, y cuando lo ha conseguido empieza a hacer otra vez malas artes«, señaló, haciendo alusión a las últimas declaraciones de Rubiales sobre Juan.
«Si quiere guerra, pues la vamos a tener. Yo voy a ver hasta donde llega él, voy a ver lo que ha dicho de mí», añadió, antes de cargar contra su sobrino. «Yo soy un desequilibrado, pero él tiene dos problemas fundamentalmente: uno es, que no se fía de nadie, porque se piensa el ladrón que son todos de su misma condición, pero luego tiene otro problema que tapa a este, que es muy fanfarrón. Le gusta alardear y contar ciertas cosas, entonces como esto puede, a veces se le va la lengua y cuenta muchas cosas. Hay muchas cosas que me ha contado él, y cuando ya ha fanfarroneado, se arrepiente porque es muy desconfiado, porque todo lo que sepa de los demás lo utiliza como arma arrojadiza».
Antes de despedirse, Luis Rubén quiso atajar las sospechas sobre que el ataque pudiese estar preparado: «Yo no estaba conchabado con él porque llevo sin hablarme con él como tres años, más o menos. Más, desde que despidió a mi hermano Juan. Yo le mandé un mensaje y le dije que como siguiera así, íbamos a tener un problema muy gordo. Me bloqueó directamente».
20MINUTOS.ES – Deportes
