Comeback Kid. Así se llama la canción que ha lanzado recientemente Caleb Moore Freundlich. Quizá no diga nada el nombre, pero el de su madre, Julianne Moore, con toda probabilidad sí. Y es ella seguramente la mayor fan y uno de los más importantes apoyos no solo de su hijo, sino también de su hija, Liv Helen. La intérprete de 64 años suele aprovechar sus redes sociales para mostrar el orgullo que siente por ambos, a pesar de que antes de que fueran mayores de edad siempre intentó que estuviesen lejos de los medios de comunicación.
Pero eso es agua pasada. Tras divorciarse, en 1995 y tras nueve años de matrimonio sin descendencia —»Me casé muy pronto y la verdad es que no quería seguir ahí», llevó a declarar— con John Gould Rubin, en 1996, durante el rodaje de la película Volviendo a casa, conoce a Bart Freundlich, el director, con el que comienza inmediatamente una relación. Se casarían en 2003, cuando ya habían tenido a sus dos hijos, lo que ella ha reconocido que fueron «los días más felices» de su vida.
La intérprete siempre ha priorizado su familia y estar con ellos en Nueva York que cualquier otro proyecto cinematográfico, afirmando que sería «miserable» su vida sin ellos. «Yo no me puedo ir a Europa a estar cuatro meses durante el año escolar, porque como cualquier otro padre u otra madre estoy todo el rato preguntándome: ‘¿Y cómo lo hago? ¿Cómo voy a los partidos? ¿Cómo voy a estar en casa para que hagan la tarea?’. Así que si voy a Londres para hacer promoción, a los dos días ya estoy de regreso en casa», dijo para The Guardian en 2010.
Caleb Moore Freundlich
El primogénito de la ganadora del Oscar y de su marido apenas si tardó en llegar una vez se confrimaron como pareja. Fue el 4 de diciembre de 1997 cuando Caleb vino al mundo. Desde muy pequeño se interesó por la música, pero, como él mismo declaró a la web Shoutout LA en 2022, a sus padres les debe su actual profesión. «Todo empezó con ellos, que siempre desearon haber sabido tocar un instrumento, por lo que insistieron en que yo aprendiera desde pequeño. Me apoyaron sin importar cómo lo hiciera», reveló.
Pero lo hacía muy bien. Es cierto que, durante la universidad, su vertiente artística ocupó una gran parte de su vida, dado que ya de por sí eran sus estudios —cursó la carrera de Música—, pero también entró en ella el deporte, dado que Caleb también se centró en el baloncesto, formando parte del equipo de Davidson College de 2016 a 2020, año, el de pandemia del coronavirus, en el que se graduó. «Estamos sumamente orgullosos de todo lo que has logrado estos últimos 4 años: graduarte con honores, jugar para los Davidson e ingresar a la escuela de posgrado… Te queremos muchísimo, Cal, y estamos muy contentos por ti», compartió la actriz en su Instagram aquel año.
Seguidamente, realizó un máster en Música con especialización en Composición Musical en la Steindhart School, una escuela cultural ligada a la Universidad de Nueva York, lo cual le ha valido para ponerle banda sonora a películas, documentales, videojuegos, cortometrajes o incluso cómics online. Asimismo, también actúa en solitario desde marzo de 2024 y recientemente ha dado a conocer que ofrecerá varios conciertos benéficos.
«Su música se reconoce por una combinación única de instrumentos acústicos, orgánicos y electrónicos. Su formación como guitarrista, tocando en bandas de rock, rock alternativo y jazz durante su infancia, junto con su formación en composición cinematográfica, le han permitido crear un sonido y un estilo propios» se lee en su página web, así como que hoy por hoy, según su perfil de LinkedIn, también trabaja como profesor adjunto del curso sobre Producción Musical para Animación en el Fashion Institute of Technology, también en Nueva York.
Por último, en su vida sentimental no puede irle mejor. En agosto de 2024 le propuso matrimonio a su novia, Kibriyaá Morgan, con quien lleva desde 2017 y que es una más de la familia. Por ahora no se han casado, aunque su pedida recibió los parabienes de multitud de estrellas de Hollywood como Halle Berry o Jennifer Garner.
Liv Helen Moore Freundlich
Fue el 8 de abril de 2002 cuando Moore y su esposo completaron la familia con el nacimiento de su hija, a la que le pusieron el nombre de Liv Helen y de quien la intérprete recuerda haber pedido que fuese niña mientras estaba embarazada. Y aunque en un principio parecía que seguiría los pasos maternos en el mundo del cine apareciendo siendo niña en un par de películas, ambas dirigidas por su padre, finalmente se ha decantado por el modelaje.
En 2017, debutó como modelo para la firma J.Crew para, posteriormente, protagonizar junto a su madre, varias campañas, como las que hizo en 2022 para la marca de cosmética Hourglass o una para una nueva línea de joyería de Bvlgari. «Llevo presumiendo de Liv desde que nació, y estoy muy impresionada por lo bien que se desenvuelve en el mundo y lo madura que es», declaró Moore para la revista Harper’s Bazaar aquel año.
La joven, de ahora 23 años y que su madre describió como una persona «inteligente, valiente y amable» tras graduarse en el instituto, es además activista por el control de armas en Estados Unidos, dado lo mucho que le marcó, cuando tenía 10 años, que su madre hubiese de explicarle la matanza producida en la escuela Sandy Hook de Newport, un momento que también fue un punto y aparte en la vida de la actriz, que desde ese día asumió un papel importante en el consejo de la organización Everytown for Gun Safety.
Liv, por su parte, se ha inspirado en ella para unirse al movimiento Students Demand Action. «Mi madre me abrió un camino para desarrollar mi confianza y unirme al movimiento», explicó Liv a la revista People, «y verla hacer este trabajo desde que era muy pequeña me llena de orgullo». Y es que ambos hijos acompañaron a sus padres en una manifestación en Washington D. C. en 2018 para la reforma de la ley de propiedad de armas.
Por ahora, se desconocen los próximos proyectos de la joven, dado que prefiere mantener su Instagram privado, lo que igualmente dificulta que se sepa algo sobre sus relaciones.
La actriz comparte a sus dos hijos junto a su marido, el director Bart Freundlich.
Comeback Kid. Así se llama la canción que ha lanzado recientemente Caleb Moore Freundlich. Quizá no diga nada el nombre, pero el de su madre, Julianne Moore, con toda probabilidad sí. Y es ella seguramente la mayor fan y uno de los más importantes apoyos no solo de su hijo, sino también de su hija, Liv Helen. La intérprete de 64 años suele aprovechar sus redes sociales para mostrar el orgullo que siente por ambos, a pesar de que antes de que fueran mayores de edad siempre intentó que estuviesen lejos de los medios de comunicación.
Pero eso es agua pasada. Tras divorciarse, en 1995 y tras nueve años de matrimonio sin descendencia —»Me casé muy pronto y la verdad es que no quería seguir ahí», llevó a declarar— con John Gould Rubin, en 1996, durante el rodaje de la película Volviendo a casa, conoce a Bart Freundlich, el director, con el que comienza inmediatamente una relación. Se casarían en 2003, cuando ya habían tenido a sus dos hijos, lo que ella ha reconocido que fueron «los días más felices» de su vida.
La intérprete siempre ha priorizado su familia y estar con ellos en Nueva York que cualquier otro proyecto cinematográfico, afirmando que sería «miserable» su vida sin ellos. «Yo no me puedo ir a Europa a estar cuatro meses durante el año escolar, porque como cualquier otro padre u otra madre estoy todo el rato preguntándome: ‘¿Y cómo lo hago? ¿Cómo voy a los partidos? ¿Cómo voy a estar en casa para que hagan la tarea?’. Así que si voy a Londres para hacer promoción, a los dos días ya estoy de regreso en casa», dijo para The Guardian en 2010.
Caleb Moore Freundlich
El primogénito de la ganadora del Oscar y de su marido apenas si tardó en llegar una vez se confrimaron como pareja. Fue el 4 de diciembre de 1997 cuando Caleb vino al mundo. Desde muy pequeño se interesó por la música, pero, como él mismo declaró a la web Shoutout LA en 2022, a sus padres les debe su actual profesión. «Todo empezó con ellos, que siempre desearon haber sabido tocar un instrumento, por lo que insistieron en que yo aprendiera desde pequeño. Me apoyaron sin importar cómo lo hiciera», reveló.
Pero lo hacía muy bien. Es cierto que, durante la universidad, su vertiente artística ocupó una gran parte de su vida, dado que ya de por sí eran sus estudios —cursó la carrera de Música—, pero también entró en ella el deporte, dado que Caleb también se centró en el baloncesto, formando parte del equipo de Davidson College de 2016 a 2020, año, el de pandemia del coronavirus, en el que se graduó. «Estamos sumamente orgullosos de todo lo que has logrado estos últimos 4 años: graduarte con honores, jugar para los Davidson e ingresar a la escuela de posgrado… Te queremos muchísimo, Cal, y estamos muy contentos por ti», compartió la actriz en su Instagram aquel año.
Seguidamente, realizó un máster en Música con especialización en Composición Musical en la Steindhart School, una escuela cultural ligada a la Universidad de Nueva York, lo cual le ha valido para ponerle banda sonora a películas, documentales, videojuegos, cortometrajes o incluso cómics online. Asimismo, también actúa en solitario desde marzo de 2024 y recientemente ha dado a conocer que ofrecerá varios conciertos benéficos.
«Su música se reconoce por una combinación única de instrumentos acústicos, orgánicos y electrónicos. Su formación como guitarrista, tocando en bandas de rock, rock alternativo y jazz durante su infancia, junto con su formación en composición cinematográfica, le han permitido crear un sonido y un estilo propios» se lee en su página web, así como que hoy por hoy, según su perfil de LinkedIn, también trabaja como profesor adjunto del curso sobre Producción Musical para Animación en el Fashion Institute of Technology, también en Nueva York.
Por último, en su vida sentimental no puede irle mejor. En agosto de 2024 le propuso matrimonio a su novia, Kibriyaá Morgan, con quien lleva desde 2017 y que es una más de la familia. Por ahora no se han casado, aunque su pedida recibió los parabienes de multitud de estrellas de Hollywood como Halle Berry o Jennifer Garner.
Liv Helen Moore Freundlich
Fue el 8 de abril de 2002 cuando Moore y su esposo completaron la familia con el nacimiento de su hija, a la que le pusieron el nombre de Liv Helen y de quien la intérprete recuerda haber pedido que fuese niña mientras estaba embarazada. Y aunque en un principio parecía que seguiría los pasos maternos en el mundo del cine apareciendo siendo niña en un par de películas, ambas dirigidas por su padre, finalmente se ha decantado por el modelaje.
En 2017, debutó como modelo para la firma J.Crew para, posteriormente, protagonizar junto a su madre, varias campañas, como las que hizo en 2022 para la marca de cosmética Hourglass o una para una nueva línea de joyería de Bvlgari. «Llevo presumiendo de Liv desde que nació, y estoy muy impresionada por lo bien que se desenvuelve en el mundo y lo madura que es», declaró Moore para la revista Harper’s Bazaar aquel año.
La joven, de ahora 23 años y que su madre describió como una persona «inteligente, valiente y amable» tras graduarse en el instituto, es además activista por el control de armas en Estados Unidos, dado lo mucho que le marcó, cuando tenía 10 años, que su madre hubiese de explicarle la matanza producida en la escuela Sandy Hook de Newport, un momento que también fue un punto y aparte en la vida de la actriz, que desde ese día asumió un papel importante en el consejo de la organización Everytown for Gun Safety.
Liv, por su parte, se ha inspirado en ella para unirse al movimiento Students Demand Action. «Mi madre me abrió un camino para desarrollar mi confianza y unirme al movimiento», explicó Liv a la revista People, «y verla hacer este trabajo desde que era muy pequeña me llena de orgullo». Y es que ambos hijos acompañaron a sus padres en una manifestación en Washington D. C. en 2018 para la reforma de la ley de propiedad de armas.
Por ahora, se desconocen los próximos proyectos de la joven, dado que prefiere mantener su Instagram privado, lo que igualmente dificulta que se sepa algo sobre sus relaciones.
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