Cristian y su hermano mellizo, Yeray, cumplieron el miércoles dos años. En su vivienda de la calle Aurea Galindo de Linares, en Jaén, hubo celebración familiar. Un día después, el jueves a medio día, y según las primeras investigaciones, Francisco, la pareja de la madre, dio una brutal paliza a ambos. Cristian murió y su hermano resultó herido de gravedad. Ese hombre de 35 años estaba ese día al cuidado de los dos pequeños.
El presunto autor del crimen, contra el que no constaban denuncias previas por violencia machista, golpeó brutalmente al hijo de su pareja
Cristian y su hermano mellizo, Yeray, cumplieron el miércoles dos años. En su vivienda de la calle Aurea Galindo de Linares, en Jaén, hubo celebración familiar. Un día después, el jueves a medio día, y según las primeras investigaciones, Francisco, la pareja de la madre, dio una brutal paliza a ambos. Cristian murió y su hermano resultó herido de gravedad. Ese hombre de 35 años estaba ese día al cuidado de los dos pequeños.
La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género califica los hechos como asesinato por violencia de género vicaria, y Cristian sería la novena víctima de este tipo en lo que va de año en España y la número 62 desde que hay registros en 2013. También han confirmado que no había denuncias previas por maltrato o contra el presunto asesino. Fuentes cercanas a la investigación han confirmado que la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) le ha tomado declaración esta mañana como víctima de violencia de género. Centenares de personas se han concentrado en la mañana de este viernes ante el Ayuntamiento de Linares para mostrar su dolor, rabia e incomprensión ante esta muerte.
Según han confirmado fuentes de la investigación, Francisco, apodado Pakillo, que fue detenido poco después de encontrarse el cadáver de Cristian, es un conocido delincuente con un amplio historial delictivo que salió hace poco más de cuatro meses de la prisión. Cuando su actual pareja y madre de los niños llegó a casa del trabajo, sobre las dos y media de la tarde del jueves, se topó con la escena terrible: uno de sus hijos asesinado y el otro malherido, supuestamente por la brutal paliza que les dio Pakillo. A falta de conocerse el resultado de la autopsia, se apunta a que Cristian murió de un traumatismo craneoencefálico y su hermano Yeray se recupera de los golpes en el hospital de Linares, aunque su vida no corre peligro.
El delegado del Gobierno andaluz en Jaén, Jesús Estrella, ha confirmado hoy que el hombre detenido “se encontraba al cuidado” de los dos pequeños, y ha añadido que la Junta de Andalucía retiró la custodia de otros dos menores a la madre, que tiene otra hija con otra pareja diferente, aunque no ha explicado los motivos. La madre del niño asesinado fue usuaria de los servicios sociales municipales, aunque poco después los rechazó. “Cada vez que se produce una víctima de este tipo fracasamos todos como sociedad”, ha indicado Estrella, que ha apelado a la “unidad institucional y a la suma de esfuerzos para acabar con esta lacra”.
“Si no vamos todos juntos en este tema, somos menos fuertes”, ha abundado el subdelegado del Gobierno de España en Jaén, Manuel Fernández, tras mostrar la “condena, repulsa y firmeza” del Gobierno ante este asesinato. Fernández ha indicado que continúa abierta la investigación, aunque el detenido no pasará aún a disposición judicial hasta que se tome declaración a varios testigos.
La ministra de Igualdad, Ana Redondo García, y la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, han expresado “su más absoluta condena y rechazo ante este asesinato machista” y trasladan todo su apoyo a familiares y amistades de las víctimas. Tanto la ministra como la delegada piden todos los esfuerzos desde las instituciones, administraciones y el conjunto de la sociedad “para llegar a tiempo y evitar más muertes”.
Según se ha indicado este viernes desde la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, en siete de los nueve casos de crímenes de violencia machista vicaria registrados este año en España el agresor era el padre de las víctimas. En el 44% de los casos constaban denuncias previas contra los presuntos homicidas y el 33% se suicidaron tras cometer los crímenes, por lo que no podrán ser juzgados por sus acciones criminales.
La violencia vicaria es un tipo de violencia machista que se utiliza para dañar y controlar a las mujeres agrediendo a sus hijos o familiares, y hay momentos con más riesgo de que suceda, como cuando estas han dado el paso de separarse. Desde 2019, el Ministerio del Interior evalúa el riesgo al que están expuestos los menores hijos de mujeres víctimas de violencia de género y ha detectado a 5.566 niños en riesgo de sufrir esta violencia.
El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 53 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.
Sociedad en EL PAÍS